Día de la Ingeniería en sede Las Heras

“Deseo centrar mis palabras en un tema que considero no sólo de importancia sino también un compromiso que debemos asumir con nuestro presente y futuro de país, en este escenario de cambios tecnológicos continuos y trascendentes en el que nuevas generaciones con nuevas ideas deberán ser los conductores de estos cambios. Creo que todos tenemos en claro que nuestra profesión es la única que puede lograr esos objetivos, y no existe otra profesión que pueda aportar lo que la ingeniería al crecimiento de las naciones. No existen naciones desarrolladas sin industrias, sin tecnología y sin investigación aplicada. O sea, sin ingenieros”, manifestó el Prof. Ing. Horacio Salgado en el marco de los actos que se llevaron a cabo el lunes 6 de junio en un nuevo aniversario del Día de la Ingeniería, que conmemora la graduación, en 1870, del Ing. Luis A. Huergo, primer egresado de la profesión.  

Ante un público conformado por docentes, alumnos, funcionarios de la FIUBA y el Ing. Gustavo Darín en representación del CAI, el decano Salgado señaló que “emprender implica tener ideas, compromiso, pasión por hacer. Es mirar a largo plazo y pensando en grande. Apostando al futuro. Y es también trabajar día a día, construyendo de a poco sobre bases sólidas. Sin emprendedores, como Domingo Faustino Sarmiento, Luis A. Huergo, Guillermo White, Otto Krause, Luis J. Dellepiane, citando solo algunos de los primeros ingenieros argentinos, y otros más recientes fallecidos ya hace algunos años, Rodolfo E. Ballester, Francisco García Olano, Enrique P. Cánepa, José L. Delpini, Hilario Fernández Long, Alberto Costantini, no existirían las obras que ayudaron al desarrollo del país”.

En otro tramo de su intervención, Salgado subrayó que “el proyecto que en su momento diseñaron los que nos precedieron en la generación del ochenta y que pusieron el basamento de nuestro país era un proyecto que en primer lugar atendía la educación del pueblo, pero no por la educación en sí misma sino para sentar las bases de un país democrático con educación gratuita y obligatoria creadora de ciudadanos libres”.

“Deseo exhortar a los ingenieros de ayer y de hoy a trabajar desde el lugar que cada uno tenga para revertir de una vez y para siempre la situación de nuestro país. Debemos lograr los más de 32.000 euros per cápita de PBI de la Unión Europea, pasar de 1 ingeniero cada 8000 o 6000 habitantes a 1 cada 2000 como Francia y Alemania, o 1 cada 1500 como Corea; o superar los 120 Kg de acero por habitante que tenemos, para llegar a los más de 500 Kg de los países desarrollados. Esto únicamente se podrá conseguir con el conocimiento y la innovación”, concluyó el decano de Ingeniería de la UBA.  

Previamente, el titular de la FIUBA había participado de uno de los paneles programados por el Centro Argentino de Ingenieros