La FIUBA en desarrollo automotriz de alta tecnología
El Vehicle Interaction Measurement Research Project (VIM-RP) es un proyecto de investigación que surgió en 2018 acerca de la dinámica del vehículo; un campo de encuentro entre ingeniería, academia y ciencia en donde por medio de las leyes físicas se busca estudiar el movimiento de un vehículo en interacción con su ambiente, y su comportamiento dinámico en relación a una serie de comandos que derivan de la intención de quien lo controla en base a la percepción del escenario físico por parte de sus ocupantes. En síntesis, se trata del estudio de la interacción ambiente-vehículo-humano funcionando en condición real. En el VIM-RP “tratamos de demostrarnos con hechos que desde la Argentina se puede trabajar integrados y en equipo, presencialmente y a distancia, interactuando con otros equipos de primer nivel en el mundo”, explica el Ing. Carlos Nerini, director del proyecto de investigación. “Tal es así, que el concepto de integración también se evidencia en las distintas disciplinas e integrantes que lo conforman desde perfiles muy variados: ingenieros, investigadores, académicos, estudiantes, creativos y autodidactas”, detalla.
El VIM-RP resulta de un proceso de formación en el ámbito profesional que la academia y la industria de la movilidad fueron apoyando en base a su interés científico ingenieril y su retorno positivo para la formación en las universidades.
“En el año 2018, los integrantes del proyecto colaboraron en un importante evento tecnológico internacional organizado por Oreste Berta, realizado en la Argentina. Allí, entraron en contacto con tecnología de primer nivel de Michigan Scientific, que les permitió medir las fuerzas y momentos entre el neumático y la pista. Más adelante, el Ing. Nerini entró en contacto con el profesor Carlo Rottenbacher, quien se unió al equipo en la realización de un workshop experimental enfocado en el uso de esta tecnología en dinámica del vehículo, en el marco de dos masters en la materia (D2VD) que coordina en la Universidad de Pavía. En este punto, lograron instrumentar un Alfa Romeo Stelvio que Stellantis –grupo constructor de vehículos– puso a disposición para los test en pista del 2020, permitiéndoles profundizar en el uso de la tecnología”, relata Nerini.
Luego de un extenso periodo de análisis de datos, la investigación se consolidó y los resultados de la exploración despertaron el interés de la industria. “Sin embargo –afirma Nerini–, era preciso una tercera experimentación, con más sensores y mejoras metodológicas y a su vez, existía la problemática de que el equipo de trabajo era limitado en cantidad de personas, respecto a esto el Ing. declara que “en ese momento fue de vital importancia el apoyo del Dr. Hernán Svoboda y del Ing. Eriel Fernández Galván con quienes habíamos empezado a construir un espacio académico/profesional de intercambio de dinámica vehicular en el Departamento de Ingeniería Mecánica”. En este contexto, el proyecto pudo desembarcar con temáticas de ingeniería de vanguardia para los y las estudiantes de la FIUBA y nutrirse de excelencia académica para tratar temas abiertos a nuevos abordajes.
“Para la tercera experimentación, el grupo Michelin puso a disposición su pista en Francia y neumáticos para poner a prueba el vehículo Stelvio. Esta vez también en suelo mojado y con mejoras y desarrollos propios generados en el proyecto que ya contaba con nuevos integrantes que se sumaron al equipo desde Argentina. El carácter bilateral del VIM-RP y las oportunidades de una interacción académica y de transferencia tecnológica entre ambos países, motivó el patrocinio de la Embajada Argentina en Roma, que resulta un apoyo institucional de enorme valor”, cuenta el Ing. Nerini. A la hora de hablar del futuro, Nerini considera que es sin dudas muy interesante lo que se viene porque estará fuertemente determinado por dos factores que hasta ahora no habían jugado un papel tan importante: la naturaleza energética de la propulsión y la conducción autónoma. Sobre el primer punto, expresa que “ya es un hecho que la movilidad eléctrica está ganando terreno y esto motiva variaciones estructurales importantes en la industria”, permitiendo que más emprendedores industriales obtengan acceso a proveer este tipo de soluciones, provocando una próspera diversidad. Y en relación al segundo, comenta que “viviremos una transición hacia este tipo de movilidad que requiere de un desarrollo enorme de nuevas capacidades para ingenieros que deberán afrontar problemas multidisciplinarios muy completos”. Por ello, debemos procurar que la industria de la movilidad se ajuste a las necesidades de la sociedad, y estar atentos a qué las leyes acompañen de manera estratégica, los desarrollos competitivos, balanceados y sustentables”, concluye.
Por su parte, el director del Departamento de Mecánica de la FIUBA Ing. Hernán Svoboda afirma que “la participación de docentes y alumnos de la carrera de Ingeniería Mecánica favorece su formación, así como la interacción con otros grupos de investigación y fabricantes del sector, resultando en una experiencia de internacionalización muy enriquecedora para todos los participantes. Dicha Vinculación continúa fortaleciéndose, previendo incorporar a más alumnos e investigadores y planificar nuevas actividades conjuntas”.