Tecnologías en la educación
Especialista en temas de educación a distancia con foco en ciencias e ingeniería, la Dra. Inga. Susana Marchisio participará del congreso a través del panel "Las tecnologías emergentes en los ecosistemas de aprendizaje", donde disertará sobre sus investigaciones en usos didácticos de laboratorios de acceso remoto, esto es, desarrollos de hardware y software a los que se accede mediante internet y que permiten la observación y el análisis de fenómenos en situaciones reales, así como la medición remota de variables involucradas.
"Más allá de los beneficios logísticos o prácticos relacionados con poder abastecer a muchos más estudiantes, docentes e instituciones de equipamientos a veces faltantes o costosos, el empleo de los laboratorios remotos, en forma complementaria con los laboratorios tradicionales, permite combinar recursos didácticos y puede colaborar eficazmente con el desarrollo de los procesos de aprendizaje", explica Marchisio.
Y agrega a modo de ejemplo: "Con base en la investigación en casos concretos, se puede destacar el hecho de favorecer la comprensión de situaciones o fenómenos de estudio, despojando al estudiante de la carga que, en ciertos casos, representa el armado, en el laboratorio tradicional, de un experimento real. En ese contexto, es posible destinar al laboratorio remoto un rol esencial para facilitar la modelización, el análisis de variables, la emergencia, descarte o confirmación de hipótesis, la comparación de registros y valores medidos, entre otros. Por otra parte, poner a disposición de los estudiantes el uso de laboratorios remotos los acerca a tecnologías en uso en el ámbito industrial, familiarizándolos con metodologías de trabajo profesionales".
En cuanto a los efectos de la utilización de estos recursos tecnológicos en lo que refiere a la formación docente, dice Marchisio que tanto estudiantes como docentes tienen que conocer y familiarizarse con las tecnologías para sacar su máximo provecho. "El docente debe conocer las posibilidades y limitaciones de los laboratorios remotos, experimentarlos y reflexionar individual, colectiva y colaborativamente sobre el potencial de sus usos para la enseñanza de su disciplina. En ningún caso estas tecnologías reemplazan al docente; por el contrario, requieren de un docente que sepa administrar recursos y estrategias, que genere actividades más centradas en los aprendizajes que en su rol protagónico como docente, que comparta con colegas y sepa evaluar en coherencia con lo anterior".