Menu

Bobina de Tesla

Los rayos son descargas eléctricas y se puede diferenciar un trueno de un relámpago, pero ambos son el mismo fenómeno que se percibe de distinta manera. El relámpago se ve, primero, y el trueno se escucha, después. En este escenario, donde la descarga está muy cerca, no se puede diferenciar el sonido de la luz.

La bobina de Tesla consiste principalmente en dos solenoides, uno de pocas vueltas y un diámetro grande en la base y otro con muchas vueltas con un diámetro pequeño. Por cómo están ubicados, al circular corriente por el solenoide de la base, este genera un campo magnético que induce una diferencia de tensión mayor a la que se aplica en la base, de la misma manera que un transformador convencional. Esta diferencia de tensión llega a ser tan alta que el aire se ioniza formando ozono que se siente como un olor agrio en el aire y conduce la electricidad formando un rayo.

Cuando la descarga sucede, se puede notar que el rayo sale de la cima de la bobina de Tesla y termina en la punta de la flecha por ser el elemento más cercano a ella. Si se rota esta flecha y se deja cerca de la bobina el extremo esférico, se puede notar que la descarga sucede en distintos puntos de la esfera, a diferencia de la forma más concentrada en la punta de flecha. Esto es así ya que las puntas tienen el efecto de concentrar las cargas. Este precepto es la base de los pararrayos que se ubican lo más alto posible y con forma de punta, para atraer la descarga. Por estos mismos principios, en caso de encontrarse en una tormenta eléctrica en un descampado, es muy importante evitar colocarse debajo de los árboles, ya que son altos, o sea que están más cerca del cielo, y suelen tener hojas puntiagudas, lo que incita a que caiga sobre ellos un rayo.